Colores para una oficina: cómo impactan en la productividad
Los colores que nos rodean influyen directamente en nuestro estado de ánimo, niveles de energía y salud mental. Pero esto no es todo. Además de condicionar nuestro bienestar, el color también impacta profundamente sobre nuestra productividad, para bien o para mal.
Así lo demuestran los estudios al respecto. Los seres humanos reaccionamos emocionalmente a los estímulos visuales que tenemos delante y cada color despierta una respuesta fisiológica dentro de nuestro cerebro, que puede ir desde la ira, la empatía, la concentración o la relajación, entre muchas otras.
Los colores, como las características, siguen los cambios de las emociones.
Pablo Picasso
¿Por qué cuidar la elección del color en los espacios de trabajo?
Como hemos visto, los elementos visuales, incluidos los colores, pueden influir en el comportamiento, los niveles de productividad, los estados de ánimo y las actitudes de los empleados.
Por este motivo, cada vez más empresas dedican tiempo y esfuerzo a elegir los colores para una oficina más adecuados para conseguir mejorar sus resultados.
Tenemos que pensar que el lugar de trabajo no es diferente a un local comercial y utilizar la paleta de colores adecuada puede cambiar drásticamente la dinámica de la fuerza laboral. En definitiva, el objetivo es crear un diseño productivo, funcional y estéticamente agradable en el entorno de trabajo.
Sin duda, lograr una combinación de espacios de trabajo ágiles y flexibles con una gama de colores determinada, puede convertirse en una poderosa herramienta de comunicación y estimular diferentes acciones dentro de tu espacio de trabajo.
Del mismo modo, la elección del color está relacionado con la imagen de marca, ya que contribuye a reflejarla y a crear un sentimiento de pertenencia en el trabajador como parte activa de la empresa. Así lo explican desde la empresa Mobiliar, especialista en proyectos integrales en oficina: «una de las principales inquietudes de nuestros clientes es mantener el carácter corporativo de la compañía«
¿Qué color debería elegir para pintar una oficina?
La selección cuidadosa del color en tu espacio de trabajo puede ser una fuente de inspiración, creatividad y felicidad para los empleados, ayudándote a reducir el estrés y los sentimientos negativos.
Gigantes tecnológicos como Google utilizan las pruebas A / B con color en sus oficinas para saber qué color consigue que los empleados sean más productivos. De hecho, repintan continuamente los espacios de trabajo para ver cómo afecta a su fuerza laboral.
Pero, ¿qué colores serían los recomendados para una oficina?
Por un lado, los colores vibrantes como el rojo y el violeta estimulan la producción de adrenalina en el cuerpo, lo que a su vez aumenta los niveles de energía y creatividad.
Por su parte, los colores pálidos (blancos, grises, crema…) neutralizan el estado de ánimo con calma y relajación, mientras que los amarillos y verdes iluminan a los trabajadores de oficina. El negro es un color intenso y atrevido y el uso de este tono, con moderación, puede contribuir a crear una atmósfera poderosa.
Así, un espacio como un call center donde los trabajadores atienden quejas de clientes y puede sufrir de situaciones de estrés, resultaría útil utilizar tonos fríos como el verde o el azul en lugar de los rojos, al considerarse más agresivos. En cambio, en un lugar de trabajo silencioso y tranquilo, que puede llevar a la monotonía, pintar la oficina con algún toque de color brillante aportará energía y estimulará la productividad.
En resumen, ¿qué colores para una oficina son los adecuados?
Rojo
Estimula el cerebro y la productividad, aunque es preciso utilizarlo con sutileza dando un toque en alguna pared, muro o pilar para no aumentar la frecuencia cardiaca y favorecer el est´res del trabajador. El rojo también es muy eficaz como «llamada a la acción» para llamar la atención de los clientes sobre los mensajes de marketing.
Azul y verde
Tienen la capacidad de estimular la creatividad y favorecer un efecto calmante y tranquilo. Al ayudar a mantener la calma, el azul también puede estimular el proceso mental y aumentar la productividad del trabajador.
Amarillo y naranja
Son colores dinámicos, optimistas y alegres que favorecen la creatividad. Son ideales para inspirar a los empleados que trabajan en campos creativos a proponer ideas innovadoras.
Blanco, grises y marrones
Los tonos claros contribuyen a iluminar los espacios de trabajo y hacer que parezcan más grandes. Pero, ¡ojo! No debemos caer en su uso monocromático para evitar crear una sensación de frío y aislamiento que favorezca el riesgo de bournout del empleado y disminuya su creatividad.
El color en sí es una experiencia visual que afecta de forma subconsciente al cerebro y, por tanto, a cómo trabajamos. Decidir qué combinación de colores incorporar en el diseño de tu espacio de trabajo requiere de planificación si tu objetivo es estimular el tipo correcto de productividad de tus empleados.
Ahora ya sabes qué tonos son los más interesantes para contribuir al éxito de tu empresa. Y tú, ¿conocías la importancia del color en los espacios de trabajo? ¿De qué color tienes pintada la oficina? Te esperamos en los comentarios.